Las faldas, una pandemia y los tacos
"Dale a un hombre los zapatos adecuados y conquistará el mundo".
La moda y
el derecho NO SON incompatibles.
Mark Bryan es un ingeniero americano, vive en
Alemania con su esposa e hijxs y hace más de cuatro años decidió usar faldas y
zapatos de taco aguja para ir a trabajar a su oficina. Tiene 62 años y es padre
de tres hijxs.
Mark conto que descubrió que usar falda y
tascos era lo suyo cuando estaba en la universidad. Entonces tenía una novia
que le pidió que se pusiera zapatos para bailar con ella. Mark dijo que desde entonces se sintió super
cómodo con aquella opción pero que tardo muchos años en animarse a usar lo que
realmente le gustaba y delante de todxs. Sin embargo, su familia, amigxs y colegas
siempre lo ha apoyado mucho. El dice que es porque estos entienden que es la
misma persona sin importar cómo me vista.
Durante el 2020, trabajando desde su hogar, decidió
comenzó a hacer un registro de sus looks y compartirlos en Instagram. A
finales de febrero de 2020 subió la primera foto a Instagram con la frase
"Clothes and shoes should have no gender" (La ropa y zapatos no
deberían tener género). A partir de ese día, registró cada outfit que eligió
para trabajar: desde el home office por el confinamiento hasta que volvió a
tomarse el tren para desplegar su elegancia en la oficina. Se volvió tendencia en redes. La inesperada
exposición y fama le dieron el empuje para pelear contra los estereotipos
sociales.
Mark ha contado que su lucha por la ropa sin
genero comenzó siendo un asunto personal, algo que impactaba directamente en
sus elecciones y su imagen. A partir de todo el apoyo recibido y al enterarse
que muchxs se identificaban con sus decisiones, decidió compartir sus experiencias.
Respecto de su estilo personal, Mark lo definió
admirando al diseñador Marc Jacobs y al personaje de Megan Markle en la serie
Suits. Ya que el personaje de Megan usaba faldas y blusas para ir a la oficina,
mientras que la mayoría de los otros personajes femeninos llevaban generalmente
vestidos.
Mark considera que la idea de un hombre con
falda y tacos puede resultar un poco molesta, y que eso se debe a que las
prendas están tradicionalmente relacionadas con lo femenino y lo masculino. A
su vez, cree que su forma de vestir puede ser considerado por algunas personas
como un signo de debilidad, dado que tradicionalmente las mujeres han sido
consideradas el sexo débil por décadas. Por último, otra cuestión problemática
que identifica es a partir de su ropa muchas veces asumen su orientación
sexual. Mark conto en entrevistas que recibe a diario mensajes positivos sobre
sus looks, sin embargo, también recibe amenazas y mensajes de odio. Mark dice
que nunca tuve miedo, ni fue atacado en la vía pública. Pero a pesar de que no
estaba siendo víctima de acoso, muchas otras personas sí lo están siendo. Mark
se muestra seguro con lo que viste, lo que hace, cómo se ve y cómo camina. Él
dice que espera que la gente reconozca eso también. Respecto de lxs haters,
como dice Mark, los débiles se alimentan de los más frágiles. Es momento de
terminar con eso.
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